Tel. 93 393 59 94

Barcelona

Català
background whatsapp chatbot RSS

Blog Netjet

Desatascos y reparaciones: Tu Blog de Confianza

Fecha: 2019-08-19 08:05:50   Autor: Netjet

¿Qué es el NIMA? Todo lo que debes saber

¿Qué es el NIMA? Todo lo que debes saber

En el artículo, te contamos todo lo que necesitas saber sobre el NIMA. Te animamos a que continues leyendo.

¿Qué es el NIMA?

El NIMA (Número de Identificación Medio Ambiental) , también llamado código de centro, es el código que identifica todos los centros y entidades registrados como productores y/o gestores de residuos. Dichas entidades, incluyen actividades de tratamiento de residuos autorizadas: transportistas, negociantes y agentes de residuos. De manera general, el NIMA está asociado a cada centro productor de residuos o cada instalación autorizada para el tratamiento de residuos.

A nivel estatal, todo centro o instalación productora o de gestión de residuos necesita ser identificada inequívocamente mediante el NIMA, t. Según lo establecido en la Ley 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados.

En el caso particular de las empresas o entidades productoras de residuos que se dedican al mantenimiento de equipos e instalaciones, se les asigna un NIMA por provincia. De esta forma, permite identificar la generación de residuos en todas las obras o mantenimiento de instalaciones realizadas por dichas empresas o entidades en dicha provincia.

¿Para qué sirve un NIMA?

Ahora que ya conoces que es el NIMA, es importante que sepas para que sirve. El NIMA es necesario indicarlo en los documentos utilizados para la tramitación de los procedimientos relativos a la gestión de residuos. Tales como el procedimiento de traslados o la memoria anual de gestores.

Los NIMAs deben ser obligatoriamente referenciados en los documentos de control de residuos peligrosos empleados cada vez que se traslada un residuo peligroso desde un centro productor a una instalación de gestión. De la misma manera que un NIF va asociado a una empresa, el NIMA va asociado a un centro. Se entiende como Centro una o varias instalaciones sujetas a las distintas autorizaciones, situadas en el mismo emplazamiento y cuyo titular sea la misma persona física o jurídica. Existen tres vectores fundamentales que determinan claramente la definición de centro o código NIMA: Titular (Datos NIF), Emplazamiento (UTM) y Actividad principal (NACECNAE).

¿Cómo se codifican los centros?

El código NIMA está formado por un código numérico de diez dígitos, haciendo referencia los dos primeros al código INE (Instituto Nacional de Estadística) de Provincia, donde se encuentra ubicado el centro. Los ocho dígitos restantes se gestionarán por cada CA como un contador.

¿Cuándo se asigna un NIMA a un centro?

Se asignará el código NIMA en el momento de iniciar el primer trámite ambiental, venga dado por una inspección, al solicitar la inscripción en un registro, al iniciar el expediente de autorización, por la tramitación de otro tipo de expediente. En definitiva, el NIMA se asigna en el momento en que la Administración tiene conocimiento de un determinado centro, susceptible de cierta actividad ambiental. La asignación del NIMA será independiente a la tramitación de la autorización.

Finalmente, un NIMA indica la existencia de un centro, esté o no autorizado. De esta forma, se podrán iniciar todos los expedientes necesarios, identificando para cada centro su código NIMA. Por tanto, que un centro tenga NIMA no significa necesariamente que esté convenientemente registrado o autorizado.

Si quieres más información sobre NIMA y otros temas relacionados con la gestión de residuos puedes contactar con nosotros.



Comparte en tus redes sociales

compartir en facebook
compartir en linkedin
compartir en twitter
compartir en whatsapp
compartir en telegram

Fecha: 2019-08-16 08:18:04   Autor: Netjet

Instalación de tuberías: reparación, rehabilitación y renovación

Instalación de tuberías: reparación, rehabilitación y renovación

En este artículo, encontrarás toda la información que necesitas sobre la instalación de tuberías.

Las tuberías de conducción de agua (ya sea agua potable como agua residual) pueden sufrir un deterioro en su servicio. Esto puede llegar a afectar a sus capacidades de transporte hidráulico, haciéndolas disminuir. En largos tiempos de servicio, diferentes factores pueden provocar potenciales fisuras en las tuberías. Por lo tanto, pueden generan pérdidas volumétricas de agua irrecuperables, disminución en la capacidad de transporte, contaminación de las aguas. Además, como principal consecuencia, costes extraordinarios para la posterior reparación de la tubería. Las operaciones más habituales son, básicamente, la inspección, la limpieza y las reparaciones puntuales de averías. Pero si, en determinados casos, la red presenta inconvenientes que el mantenimiento no puede solventar, habrá que proceder a su rehabilitación. Finalmente, cuando esto resulte inviable, se llevará a cabo su renovación.

Se entienden todo tipo de reparaciones, rehabilitaciones y reformas que se realicen en la red de alcantarillado con objeto de solucionar los problemas surgidos durante la explotación, y no eliminables con la limpieza.

A la hora de reparar tuberías de saneamiento, ya sean de aguas de lluvia o residuales, la innovación tecnológica permite en la actualidad hacerlo sin realizar una zanja.

Materiales como el plomo, o el fibrocemento, tienden a agrietarse con el  paso de los años y provocan averías o filtraciones de agua, por lo que requieren de una reparación, renovación o rehabilitación inmediata.

Factores relacionados con la instalación de tuberías

Hay que tener en cuenta que muchos de los problemas que se encuentran en las redes vienen derivados de una deficiente instalación de tuberías. Por ejemplo, junta desplazada, oclusión de arena, gravilla, uniones con junta elástica, incorrecta ejecución del proceso de unión, defectuosa compactación del terreno o elección del material de recubrimiento. Por todo ello, es importante que tanto el personal encargado de la instalación de la red como el encargado de su mantenimiento, reparación, rehabilitación o renovación, tenga el mejor conocimiento sobre el correcto manejo e instalación de tuberías.

De hecho, las patologías de instalaciones suponen alrededor del 11% de los de casos de siniestralidad. Existen las patologías directas, aquellas que provocan fallos en la propia instalación, afectando al servicio para el que están concebidas,  y las indirectas, aquellos defectos ocasionados por las instalaciones a otros elementos ajenos a la propia instalación.

En definitiva, ambos tipos de patologías están estrechamente vinculadas, ya que una patología directa puede conllevar otra indirecta (por ej. la rotura de una bajante podría producir daños en la albañilería y acabados del edificio).

Claves de la reparación, rehabilitación y renovación de tuberías

A la hora de hacer la reparación de tuberías se pueden presentar dos casos distintos que conllevan métodos y soluciones diferentes. Por ejemplo, si las tuberías son visibles y localización de un deterioro o rotura resulta visible, o si las tuberías están empotradas y requieren otro tipo de detección, son factores clave a la hora de determinar el método de reparación a emplear. A continuación, detallaremos los elementos clave de las tareas de reparación, rehabilitación y renovación de tuberías.

  • Reparación

Algunas de las razones principales de las causas que originan las fugas en los sistemas de distribución de agua son: una incorrecta elección de los materiales de la red, una deficiente instalación y asentamiento de las tuberías, corrosión, deficiencias en valvulería, sobrepresiones, actuaciones externas, entre otros.

Se utilizan normalmente para segmentos cortos de tubería llamada reparaciones puntuales. Su fin es abordar los defectos localizados y recuperar, fácilmente, una condición estructuralmente sólida.

El tipo de reparación a realizar sobre la tubería dependerá del daño que se haya producido sobre la misma, y dependerá también del material y tipo de tubería.

En general, los tipos de reparación se pueden dividir en las siguientes categorías:

    • Reparación sin corte de tubería: Este tipo de reparación se aplica cuando el el daño ocasionado en la tubería es pequeño, éste se puede reparar con una pieza de reparación mecánica apropiada para la dimensión de la avería y la presión nominal de la tubería instalada.

En caso de pequeñas roturas o agujeros que no requieran la sustitución de la tubería, se pueden realizar reparaciones rápidas y duraderas. En este caso, se utilizan abrazaderas de reparación, manguitos partidos o acoplamientos flexibles. Por lo tanto, si el daño ocasionado en la tubería es pequeño (por ejemplo, un picotazo de un compresor o máquina, un agujero o una pequeña fisura), éste se puede reparar con una pieza de reparación mecánica apropiada para la dimensión de la avería y la presión nominal de la tubería instalada.

    • Reparación con corte de tubería: Este tipo de reparación se recomienda cuando se trata de averías de dimensiones importantes. En dichos caso, las reparaciones  se realizan mediante la sustitución del tramo de tubería afectado.
  • Rehabilitación

Con la rehabilitación de tuberías se pretende extender la vida operativa de un tubo y restaurar gran parte o la totalidad de la capacidad hidráulica de la tubería que afectada negativamente por corrosión interior, aumento de la rugosidad, disminución de diámetro, filtraciones. Así, extenderemos su vida útil. Si no se corrigiera esta situación se llegarían a producir filtraciones mayores y fallos que pueden llevar a la suspensión del servicio y reparaciones costosas.

Los actuales equipos de limpieza y diagnóstico que trabajan con cámaras y monitores, nos permiten primero limpiar y dejar libres de obstáculos que impidan una comprobación total de cada tramo, y posteriormente hacer algo mucho más interesante que una simple reparación, con los sistemas de rehabilitación de tuberías.

La revisión interior con equipos que cuentan con una cámara inspección tuberías, permiten no sólo realizar el chequeo inicial de las tuberías, sino que además facilitan al máximo las comprobaciones posteriores para garantizar la eficacia total de la rehabilitación.

Actualmente, existe una amplia gama de tecnologías punteras para la rehabilitación de tuberías, las más destacables siendo las tecnologías de rehabilitación sin obras o zanjas. A continuación detallamos dos de las más importantes de dichas tecnologías actualmente:

    • Packers (también conocidos como empacadores): Son elementos hinchables que se amoldan o ajustan al diámetro de la tubería que se esté reparando. Una vez localizada la avería de que se trate, el empacador se transporta hasta la sección de la tubería que ha de ser saneada, y allí se infla hasta que llene el tubo a reparar.
    • Encamisado mediante manga CIPP: Se emplea especialmente para aquellas que se hallen muy dañadas o bien para una renovación de infraestructuras a nivel integral. Se extrae la tubería a renovar mediante una manga de poliéster o de fibra de vidrio, que se haya impregnado previamente de determinados tipos de resinas.
  • Reemplazo

Si las tuberías están deterioradas o llevan muchos años instaladas, habría que hacer una sustitución total de la instalación que con los métodos tradicionales supondría el picado de toda la superficie en la que se encuentra empotrada la tubería estropeada.

En los casos en los que la red esté seriamente dañada, es recomendable la renovación de la red para evitar los innumerables fallos y roturas producidos, los costes derivados de su reparación y las molestias para los vecinos de las zonas afectadas. Además, en muchos casos, la antigüedad de las redes hace aconsejable también su renovación y sustitución.

El reemplazo de la tubería se utiliza habitualmente cuando una tubería tienen defectos estructurales graves como ovalización importante o derrumbamiento, o cuando se necesita una mayor capacidad de flujo. El método principal de renovación sin zanjas es el pipe-bursting, que también puede ser utilizado para aumentar el diámetro de la tubería. Por otro lado, en muchos casos, la antigüedad de las redes hace aconsejable también su renovación y sustitución.

Otro método de renovación de tuberías es el llamado TIP (“Tight in pipe” en inglés). Esta técnica consiste en  la sustitución de antiguas conducciones por otras nuevas de polipropileno. Este procedimiento tiene como base la deformación de la nueva tubería, de forma mecánica, para introducirla de forma vertical en la tubería antigua.

Este método tienen las principales ventajas de:

  • poder emplearse: para la renovación de tuberías con cualquier tipo de daño, ya sean a causa de deterioro, roturas, fugas, averías de cualquier clase.
  • poder aplicarse en tuberías con un diámetro medio o pequeño, éstos se pueden uniformar con un manguito que cumpla con las condiciones técnicas requeridas.

La importancia del mantenimiento preventivo

Quisiéramos destacar que, la mejor manera de asegurar una larga vida útil de tus redes de saneamiento es mediante la realización de un regimen periódico y eficaz de mantenimiento preventivo.

La mejor forma es sin duda contratar un mantenimiento periódico por mucho menos de lo que te supones, teniendo a tu alcance una inspección de tuberías con robot de diagnóstico y limpieza de las tuberías que te evitará reparaciones mayores en muchos de los casos.

La limpieza de tuberías y bajantes tanto de pluviales, como del saneamiento y de las arquetas y fosas séptica es vital para el mantenimiento adecuado de la red.

Si quieres más información sobre nuestros servicios de reparación, rehabilitación y renovación de tuberías, puedes contactar con nosotros.



Comparte en tus redes sociales

compartir en facebook
compartir en linkedin
compartir en twitter
compartir en whatsapp
compartir en telegram

Fecha: 2019-08-12 10:03:38   Autor: Netjet

Selección del proceso de reparación de una tubería

Selección del proceso de reparación de una tubería

Algunas de las razones principales de las causas que originan las fugas y otros tipos de averías en los sistemas de distribución de agua son: una incorrecta selección de los materiales de la red, una deficiente instalación y asentamiento de las tuberías, corrosión, deficiencias en valvulería, sobrepresiones, actuaciones externas, entre otras. Estos posibles orígenes de las averías, se deben tener en cuenta en el manejo operacional de la red, y en su mantenimiento preventivo, con el fin de prolongar su vida útil sin fallos.
A la hora de reparar tuberías de saneamiento, ya sean de aguas de lluvia o residuales, hay que tener en cuenta que todas las tuberías tienden a agrietarse con el paso de los años y provocan averías o filtraciones de agua, por lo que a menudo requieren de una reparación, renovación o rehabilitación inmediata. Pero, cómo se sabe si hay que renovar, reparar o rehabilitar una tubería, y cómo se sabe qué proceso de reparación elegir?
En el artículo, te vamos a explicar cómo elegir el proceso de reparación de una tubería teniendo en cuenta el tipo de avería. Por lo tanto, en todos los casos, será siempre necesaria una rápida actuación: identificación de la avería, elección del procedimiento de reparación y su ejecución.

¿Cuáles son los principales tipos de avería en las tuberías de saneamiento?

A  continuación, detallamos algunas de las típicas averías que ocurren en las tuberías de las redes de alcantarillado:
  1. Roturas en las canalizaciones: Pueden dar origen a la entrada de elementos extraños en la red. Este tipo de avería se manifiesta, entre otros modos, mediante reducción de caudal o presión del agua.
  2. Obstrucción de cazoletas, bajantes, imbornales, arquetas y colectores: Estas pueden conducir al bloqueo de las vías evacuación de las aguas residuales, y en caso extremos, la rotura por reventón al entrar en carga la red.
  3. Picadura: Pequeño agujero producido habitualmente por la acción exterior de la maquinaria de obras o por acción de la corrosión. A veces se pueden encontrar averías causadas por fugas en antiguas abrazaderas de toma de ramales, las cuales al eliminarse dejan al descubierto el agujero realizado sobre la tubería.
  4. Aparición de ruido, ocasionado por piezas defectuosas o instalaciones mal ejecutadas.
  5. Accionamiento defectuoso de las válvulas, que originará un levantamiento de los sedimentos y el posterior enturbiamiento del agua.
  6. Conducciones en mal estado, que provocarán cambios en las características del agua.
  7. Rotura neta, en redondo o tronchado: Seccionamiento de la tubería por el plano más o menos perpendicular a ésta.
  8. Fisura o raja: Pequeña abertura longitudinal en la superficie de la tubería. La acción exterior de la maquinaria o una sobrepresión pueden provocar la fisuración de la tubería.
  9. Reventón: La acción exterior de la maquinaria o una sobrepresión pueden provocar el estallido (reventón) de la tubería.

¿En qué consiste una reparación de tuberías?

Se entienden todo tipo de reparaciones, rehabilitaciones y reformas que se realicen en la red de alcantarillado con objeto de solucionar los problemas surgidos durante la explotación, y no eliminables con la limpieza.
El tipo de reparación a realizar sobre la tubería dependerá del daño que se haya producido sobre la misma. También, material y tipo de tubería. Una vez conocida la localización exacta de la avería, las afecciones que esta puede ocasionar en la red y realizado el cierre del servicio, deberá decidirse qué tipo de reparación se va a llevar a cabo.

Criterios de selección en una reparación

Por lo tanto, para una reparación se pueden tener en consideración los siguientes criterios:
  • Tipo de rotura (neta, picadura, fisura, reventón)
  • El motivo de la avería (sobrepresión, mala ejecución, corrosión, etc.).
  • Material de la tubería
  • Diámetro exterior del tubo
  • Elemento de reparación (abrazadera, manguito, manguito autoblocante, virola…).
  • La necesidad de llevar a cabo una reparación con o sin corte de tubería. Esta decisión conllevará la realización, en caso de ser necesarias, de zanjas, con el consiguiente inconveniente de cortes de calles y molestias a los abonados.
  • Renovar o rehabilitar el tramo de la red afectado por la avería.
  • La necesidad de tener en acopio tuberías o elementos de la red compatibles con las que se han sufrido la avería (material, diámetro, etc.).

Por otro lado, las compañías de agua deben decidir la renovación de tuberías en base a un análisis integral de costes relacionado con el mantenimiento, la construcción, el impacto medioambiental y el material que se va a utilizar. De esta forma, se seleccionará la opción más ventajosa.

Criterios de mantenimiento correctivo

El mantenimiento correctivo es un mantenimiento de reparación que se realiza después de un fallo o rotura en el sistema, no es programado previamente y es requerido por una determinada avería (por ejemplo, aparición de una fuga de agua).
Además, a la hora de seleccionar el tipo de reparación, hay que tener en cuenta los siguientes períodos de tiempo de mantenimiento correctivo en los cuales el elemento averiado está operativo:
  • Transcurrido desde que se produce la avería hasta que se detecta, o tiempo de respuesta
  • Necesario para contar con quien efectúa la reparación (disponibilidad del personal técnico encargado de la reparación)
  • Que transcurre hasta disponer de los recambios necesarios para reparar el fallo.
  • Necesario para subsanar la avería
  • Tiempo necesario para la nueva puesta en servicio de la red (limpieza, desinfección…).

Próximamente trataremos con más detalle los principales tipos de mantenimiento correctivo; reparación, rehabilitación, renovación entre otros. Si estás interesado en este tema, tal vez también te ayude el anterior artículo. No obstante, si tienes cualquier duda, puedes contactar con nosotros.



Comparte en tus redes sociales

compartir en facebook
compartir en linkedin
compartir en twitter
compartir en whatsapp
compartir en telegram