Tratamiento biológico
Definición:
El tratamiento biológico es un proceso utilizado en empresas de saneamiento para limpiar y purificar el agua contaminada. Este método se basa en el uso de organismos vivos, principalmente bacterias, que comen y descomponen sustancias nocivas presentes en el agua, transformándolas en compuestos menos dañinos.
Explicación detallada:
- Organismos utilizados: Generalmente, se utilizan microorganismos como bacterias y hongos. Estos seres vivos son muy pequeños y no pueden ser vistos a simple vista.
- Proceso: Las bacterias consumen los desechos orgánicos presente en el agua como si fuera su alimento. Al hacer esto, transforman la materia orgánica en dióxido de carbono, agua y otros subproductos que no son dañinos para el ambiente.
- Tipos de tratamiento biológico:
- Aeróbico: Requiere de oxígeno para que las bacterias realicen su trabajo. Este tipo de tratamiento es común en plantas de tratamiento de aguas residuales y suele ser eficiente para eliminar una gran cantidad de compuestos orgánicos.
- Anaeróbico: No necesita oxígeno. Las bacterias que realizan este tipo de tratamiento prosperan en ambientes sin oxígeno, y son ideales para tratar ciertos desechos industriales.
- Ventajas:
- Es un método natural y generalmente más amigable con el medio ambiente comparado con tratamientos químicos.
- Ayuda a reducir el uso de productos químicos contaminantes.
- Suele ser económico debido al uso de procesos naturales.
- Aplicaciones: Se utiliza para tratar aguas residuales domésticas e industriales, así como para limpiar suelos contaminados.
Importancia:
El tratamiento biológico es crucial para mantener un equilibrio ecológico, ya que ayuda a devolver agua limpia y segura al medio ambiente, protegiendo tanto a las personas como a la flora y fauna locales.