¿Qué es el vaciado de lodos y por qué es importante?

Fecha: 2019-03-08 09:00:02

Autor: Netjet

Todos los que viven en zonas rurales han escuchado hablar alguna vez del vaciado de lodos. También los habitantes de zonas apartadas en las que no hay un sistema de alcantarillado. Muchos incluso tienen que realizar esta operación de manera periódica. Para ello se requiere la colaboración de un experto en el vaciado de lodos, o en el de fosas sépticas, como se conoce al lugar en el que se acumulan.

Los lodos que se concentran en este tipo de fosas no son otra cosa más que los restos de las aguas residuales que llegan a ellas a través de distintos sistemas de vertidos de comunidades o de viviendas. Suelen encontrarse en terrenos algo alejados de las viviendas, bajo tierra. Cuentan, eso sí, con un acceso a nivel de suelo para poder vaciarlas cuando es necesario, y retirar los lodos que albergan. Son solo lodos, prácticamente sin otro tipo de residuos, porque las propias fosas ya se encargan de realizar un tratamiento básico de las aguas que reciben. Eso sí, cuando se extraen de las fosas, hay que tratarlos adecuadamente.

¿Cómo se acumulan lodos en las fosas sépticas?

El funcionamiento básico de una fosa séptica consiste en un tratamiento de aguas residuales domésticas en un depósito hermético de una o dos cámaras. En dicho depósito se realiza una separación de la materia orgánica contenida y descomponiéndola.

Es una forma sencilla y económica de tratar las aguas negras y está indicada, preferentemente para zonas rurales o residencias situadas en parajes aislados. Sin embargo, el tratamiento no es tan completo como en una estación para tratamiento de aguas negras.

Los pozos ciegos (frecuentemente confundidos con las fosas sépticas), son otro tipo de tratamiento de aguas residuales en zonas rurales aisladas. Consisten en un agujero excavado en el suelo a donde irán las aguas residuales de las viviendas, como fin del trayecto de los desagües, y este agua quedará ahí estancada. La consecuencia de este tipo de tratamiento es que con el paso del tiempo acaba filtrándose el agua por la tierra, quedando tan solo los residuos sólidos, por lo tanto, el filtrado se realiza de forma natural, con lo que deja pasar a la tierra ciertos tóxicos perjudiciales para el medio ambiente. Por este motivo, el empleo de este tipo de sistema es cada vez menos frecuente.

De cualquier modo, es indispensable que tanto los pozos negros como las fosas sépticas tengan un mantenimiento periódico por parte de un profesional, que consiste básicamente en su limpieza y vaciado.

¿Cuáles son las características de los lodos?

Los lodos se caracterizan por ser un residuo extremadamente líquido (más de un 95% de agua). Su composición es variable y depende de la carga de contaminación del agua residual inicial y de las características técnicas de los tratamientos llevados a cabo en las aguas residuales.

Según datos del Registro Nacional de Lodos, el 80% de los lodos procedentes de fosa sépticas, pozos negros y depuradoras tiene como destino final su utilización agrícola .

¿Por qué es importante el vaciado de lodos?

En primer lugar hay que destacar que las fosas sépticas, según las directivas de protección del medio ambiente, están sometidas a reglamentación en el territorio de la Comunidad Europea. Se exige que las mismas sean revisadas y vaciadas cada cierto tiempo, dependiendo de sus propias características, de su localización y su diseño.

La limpieza adecuada de las fosas sépticas es más importante de lo que puede parecer a simple vista. Al hacerlo, se evitan problemas en los desagües de las viviendas. Por ejemplo, atascos. También malos olores, ya que cuando una fosa está en mal estado o muy llena, los desprende.

Pero no basta con retirar los lodos del todo. También hay que limpiar correctamente los filtros de la fosa séptica. Y comprobar que no sufre desperfectos, lo que puede hacerse introduciendo una cámara en ella. Así se podrá grabar su interior y comprobar si es necesario o no realizar alguna reparación en ella.

Cómo se lleva a cabo un vaciado de lodos

Como hemos mencionado, el vaciado de lodos y la limpieza de la fosa séptica debe realizarse periódicamente para evitar problemas. Saber cuándo es necesario puede ser complicado. Por lo tanto, lo más recomendable es consultarlo con un experto. Pero en general, no hay que esperar a que se llene, ni mucho menos. Es conveniente hacerlo cuando está más o menos a la mitad de su capacidad.

A menudo, en función del dimensionado de la fosa séptica, el vaciado de los lodos puede hacerse cada año o cada dos años. La frecuencia del vaciado también depende del uso que se le de y también del estado en el que se encuentren las instalaciones.

Las tareas de limpieza y extracción se hacen normalmente mediante un camión cisterna que con una bomba extrae los lodos y se transporta a una planta depuradora donde pueda ser tratada en su totalidad.

Cuando estos lodos o residuos alcanzan el 50% de la capacidad, es cuándo deberemos llamar al profesional para que realice la retirada de los lodos. Estos no serán retirados en su totalidad, puesto que son necesarios para que el sistema pueda volver a ponerse en funcionamiento

Aunque el vaciado de lodos lo realice un experto, es conveniente conocer sus pasos. El primero es, lógicamente abrir su tapa. Hay que hacerlo con cuidado de no respirar los gases que provoca la fermentación del lodo y la materia fecal. Después de abrirla dejar salir estos gases durante un rato antes de seguir. Y por supuesto, hay que evitar fumar cerca de la fosa. Lo siguiente que hay que hacer es preparar la bomba que se utilizará para extraer los lodos. Primer hay que aspirar el agua de la parte superior, y después ir bajando por el pozo sin que llegue al fondo. Poco a poco irán aspirándose los lodos. Ten presente que no es conveniente retirarlos todos, ya que hay que dejar una capa en la parte inferior de la fosa.

A medida que se va vaciando el lodo hay que ir llenando el pozo con agua limpia. Eso sí, hay que hacerlo con cuidado. La cantidad de agua que entra nunca ha de ser más que la de los lodos que se van retirando. No hay que olvidar limpiar los filtros de la fosa con agua a presión para que queden en buen estado. Cuando el lodo retirado sea más o menos el 80% del total, hay que parar la extracción y dejar el restante. Así se podrán realizar más adelante las tareas de depuración. Por último, hay que añadir un activador de bacterias al agua, para que se active el tratamiento básico de los residuos. Hecho esto, ya se puede tapar la fosa.

Si necesitas más información sobre nuestros servicios de mantenimiento y vaciado de lodos de tu fosa séptica, no dudes en contactarnos.

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