Una visión global del mantenimiento de las EDAR

Fecha: 2019-05-06 09:00:35

Autor: Netjet

En la operación de una EDAR (Estación de Depuración de Aguas Residuales) existen muchos aspectos importantes que van más allá de los procesos de depuración de agua en sí. Tales como los costes energéticos, la gestión de los lodos y otros residuos generados, y el buen mantenimiento en general.

Por este motivo, en el diseño de una planta depuradora es muy importante elegir una combinación de tratamientos que permita conseguir que no se superen los límites establecidos en la autorización de vertido para cualquiera de los parámetros incluidos en ella y que el coste de operación sea asumible, tanto en términos de energía, como en términos de mantenimiento y amortización.

La gestión eficiente del agua presenta nuevos retos y necesidades para la industria alimentaria y las depuradoras urbanas. La racionalización de los costes de gestión del ciclo del agua y la previsible adopción de nuevas restricciones en la calidad de los vertidos, son algunos de los temas en alza en la actualidad.

El adecuado mantenimiento de las depuradoras de aguas industriales, comporta la previa y correcta implementación de las acciones necesarias para garantizar la máxima disponibilidad de los equipos, el mínimo consumo energético y la mayor vida útil de estos.
En cualquier caso, cualquier depuradora actual tendrá que mejorar, gradualmente, sus instalaciones para sustituir equipos por otros más eficientes, fundamentalmente, de menor consumo energético y, adicionalmente, se deberá invertir en tecnologías más modernas que permitan mayores rendimientos de depuración para lograr, con carácter general, la reutilización del efluente obtenido con el menor coste.
Otro aspecto que deberán mejorar las depuradoras es el control de olores dado que, una elevada proporción de ellas está próxima a viviendas y establecimientos comerciales. Esto llevará a cubrir las depuradoras, total o parcialmente, para captar y tratar los compuestos volátiles olorosos. Por supuesto, al incrementarse la población, en ubicaciones urbanas y al incrementarse la actividad industrial, será necesario ampliar la capacidad de la depuradora.

¿Qué sucede con las empresas que no cuentan con el adecuado mantenimiento de las estaciones depuradoras de aguas industriales?

No realizar las adecuadas labores de mantenimiento en una depuradora, se podría traducir en:
  • Instalaciones deterioradas.
  • Acortamiento de la vida útil de los equipos.
  • Incremento en los consumos energéticos por ineficiencias.
  • Daños al medio ambiente por vertidos de aguas depuradas deficientemente.
  • Incremento en los riesgos de multas por no cumplir con los parámetros de vertido.
En términos generales, el abandono o negligencia de las tareas de mantenimiento de una EDAR, puede conducir a averías imprevistas en momentos inoportunos y a otros tipos de costes de personal, consumo de productos químicos y medioambientales. 

El coste de explotación y mantenimiento de las depuradoras de aguas industriales suelen variar en función del tamaño de la instalación y de la tecnología utilizada.

Las empresas que apuestan por la explotación y mantenimiento de sus depuradoras de aguas industriales lo ven como una inversión y evidencian una dedicación de recursos económicos que se traducen en ventajas como: reducción de costes, aumento de la vida útil de los equipos, incremento de la disponibilidad y la reducción de riesgos de verter fuera de los parámetros establecidos.

En lo referente al consumo energético, hay que tener presente que, como media, la mitad del consumo eléctrico en una depuradora se realiza en la aireación de los tratamientos biológicos aeróbicos. Las depuradoras pequeñas, con menos recursos para el control de sus operaciones y con un diseño simplificado en comparación con las instalaciones de gran tamaño, tienen un consumo unitario del orden de 50 kWh/habitante y año. En grandes depuradoras, el consumo energético oscila en un rango de 20 – 30 kWh/habitante y año.

La gestión de la explotación y mantenimiento de las depuradoras de aguas industriales, debe disponer de herramientas de control adecuadas para poder realizar una evaluación periódica, deseable cada año, sobre la sostenibilidad económica de la misma. Se recomienda que esta evaluación sea realizada por empresas con experiencia en el servicio integral (explotación y mantenimiento) de las instalaciones de potabilización (ETAP), depuración (EDAR) y reutilización de aguas (ERAR), tanto industriales como urbanas.

¿En qué consisten las tareas de mantenimiento de una EDAR? 

Las personas encargadas de mantener las EDAR, generalmente, son las personas responsables de la coordinación  y ejecución de las operaciones de mantenimiento preventivo en los equipos. Estos garantizan la buena explotación de este tipo de instalaciones.
Las labores que componen la explotación de una EDAR, se pueden clasificar en dos apartados principales; la operación del sistema de tratamiento y el mantenimiento de la infraestructura.  Dentro del ámbito de estos dos apartados también se incluyen las tareas de detección y caracterización de los diferentes riesgos derivados de los distintos procesos, equipos o residuos generados en la planta, así como la aplicación de medidas y de protección en base a los riesgos detectados. 

Operación del Sistema de tratamiento

Se trata del conjunto de labores en el manejo de la instalación a través del conocimiento de los valores de los parámetros que definen el estado de los diferentes procesos de tratamiento. Dentro de esta tarea las responsabilidades incluyen: 
  • La puesta en marcha, verificación y parada del funcionamiento de los procesos unitarios.
  • Actuar sobre los procesos de tratamiento, efectuando las actuaciones oportunas para asegurar el correcto funcionamiento y control.
  • Registrar los datos de los instrumentos y medidores instalados de acuerdo con las especificaciones propias de la EDAR.
  • Tomar muestras representativas de los afluentes y efluentes.
  • Colaborar en las operaciones de separación, tratamiento y retirada de lodos y residuos.

Mantenimiento de la infraestructura

El objetivo de esta actividad es asegurar el estado y funcionamiento de los equipos e instalaciones que permiten la capacidad de tratamiento con los parámetros de vertido determinado por la Legislación. Dentro de esta tarea las responsabilidades incluyen: 
  • Planificar y efectuar el mantenimiento preventivo de los equipos y procesos, en base al cronograma y criterios establecidos y registrando los datos oportunos.
  • Detectar anomalías en el funcionamiento de los equipos mecánicos y eléctricos mediante un plan de mantenimiento e inspección visual.
  • Efectuar ajustes y reparaciones sencillas en base a los problemas detectados y siguiendo las instrucciones y protocolos fijados.

Próximamente miraremos con detalle las tareas fundamentales de mantenimiento y gestión de lodos y sólidos de las diferentes etapas de tratamiento de las EDAR (urbanas e industriales). Si tienes cualquier duda, ponte en contacto con nosotros.

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